Descubre una región donde la naturaleza y la tradición se fusionan de manera perfecta. Esta ruta en camper por la Sierra del Maigmó, Jijona y sus alrededores te llevará a través de parajes imponentes, pueblos con historia y experiencias inolvidables que reflejan la esencia del interior de Alicante.
Recorrer la Sierra del Maigmó y sus alrededores es adentrarse en una región que combina la majestuosidad de paisajes naturales con el encanto de pueblos llenos de historia y tradiciones. Desde las calles empedradas de Castalla hasta los sabores únicos de Jijona, pasando por las maravillas geológicas de las Cuevas de Canelobre y las vistas impresionantes del Balcón de Alicante, esta ruta ofrece una experiencia inolvidable para quienes buscan conectar con lo auténtico. Acompáñanos en este viaje que mezcla cultura, naturaleza y momentos únicos en cada parada.
Día 1: Castalla y el Paisaje Protegido de la Sierra del Maigmó
La aventura comienza en Castalla, un pintoresco municipio situado en el corazón del interior de Alicante, conocido por su relevancia histórica como parte de la antigua frontera entre los reinos de Aragón y Castilla. Este enclave estratégico no solo ha sido testigo de importantes acontecimientos medievales, sino que también conserva un rico legado cultural que aún puede apreciarse en su arquitectura y tradiciones. Su casco antiguo, de calles empedradas y casas blancas, nos transporta al pasado, mientras ascendemos al majestuoso castillo que corona la localidad. Esta fortaleza, de origen árabe y posteriormente ampliada por los cristianos, ofrece unas vistas espectaculares de la comarca de l'Alcoià. Dentro de sus murallas, uno puede imaginar cómo era la vida en tiempos medievales y disfrutar de la tranquilidad que brinda este enclave histórico.
A pocos kilómetros de Castalla se encuentra el Paisaje Protegido de la Sierra del Maigmó, un lugar ideal para los amantes de la naturaleza. Esta zona, conocida como "el pulmón de Alicante", está cubierta por densos pinares y salpicada de senderos que permiten adentrarse en su belleza. Entre sus rincones más destacados se encuentra el camino que lleva a la Cima del Maigmó, desde donde se puede contemplar el litoral mediterráneo en días despejados. La tranquilidad de esta sierra es perfecta para desconectar del ritmo urbano y conectar con la naturaleza en su estado más puro.
Día 2: Jijona y el Museo del Turrón
El segundo día nos lleva a Jijona, un pueblo conocido mundialmente por su turrón, pero que esconde mucho más. Pasear por sus calles es descubrir una localidad con un rico patrimonio histórico y cultural. Entre sus atractivos destaca la iglesia de Santa María y las ruinas del castillo almohade, desde donde se obtienen unas vistas espectaculares del valle. Además, los mercados locales ofrecen la oportunidad de degustar productos típicos más allá del turrón, como mieles artesanas y embutidos locales.
Una parada obligada es el Museo del Turrón, situado a las afueras del pueblo. Este dulce navideño, que ha dado fama internacional a Jijona, tiene sus raíces en la tradición árabe, que introdujo el uso de miel y frutos secos en la repostería. Durante siglos, los artesanos locales han perfeccionado su elaboración, convirtiéndolo en un emblema cultural y gastronómico de la región. Este museo nos invita a conocer el proceso artesanal de elaboración de este dulce navideño, que tiene su origen en la mezcla de tradiciones árabes y cristianas. La exposición cuenta con antiguas herramientas de producción, videos explicativos y, por supuesto, una degustación que hará las delicias de los visitantes. Este viaje por los sabores y aromas de Jijona es una experiencia que combina historia y gastronomía de manera única.
Día 3: Cuevas de Canelobre y Busot
Continuamos hacia las famosas Cuevas de Canelobre, situadas en el término municipal de Busot. Estas cuevas son accesibles por una carretera serpenteante que atraviesa un hermoso paisaje montañoso, ofreciendo vistas espectaculares a medida que te acercas. Descubiertas hace siglos, se dice que fueron utilizadas como refugio durante la Guerra Civil, lo que añade un fascinante trasfondo histórico a su belleza natural. Estas cuevas son una maravilla geológica que sorprenden desde el primer momento. Al adentrarse en ellas, nos encontramos con una sala principal que impresiona por su altura y por las formaciones de estalactitas y estalagmitas, que parecen esculturas naturales. La iluminación estratégicamente colocada resalta la majestuosidad de este entorno subteráneo, mientras una guía experta explica cómo se han formado estas maravillas a lo largo de milenios.
Tras la visita, el pequeño pueblo de Busot nos espera con su encanto singular. Este municipio, encaramado en una colina, cuenta con un casco urbano lleno de rincones pintorescos y vistas al valle que lo rodea. Además, su cercanía a las cuevas ha fomentado una rica oferta de artesanía local, perfecta para llevarse un recuerdo único del viaje. No podemos dejar de visitar el antiguo lavadero y la ermita de San José, dos iconos que reflejan la historia de este acogedor pueblo.
Día 4: Embalse de Tibi y Balcón de Alicante
El penúltimo día nos lleva al Embalse de Tibi, una obra de ingeniería que data del siglo XVI y que aún hoy se considera una de las presas más antiguas de Europa en funcionamiento. Rodeado de montes y vegetación mediterránea, este embalse es un lugar perfecto para disfrutar de la calma y reflexionar sobre la importancia del agua en una región tan seca. Un paseo por sus alrededores nos permite apreciar la magnitud de esta construcción y la belleza del entorno natural que la rodea.
Para finalizar el día, el Balcón de Alicante nos regala una de las vistas más impresionantes de la provincia. Este mirador, ubicado en plena Sierra del Maigmó, es ideal para quienes disfrutan de la fotografía o simplemente quieren relajarse en un entorno natural. La mejor hora para visitarlo es al atardecer, cuando los colores del cielo y el paisaje se fusionan en una vista inolvidable. Además, es un lugar perfecto para un pequeño picnic mientras se disfruta del horizonte. Este mirador, situado en plena Sierra del Maigmó, ofrece una panorámica que abarca desde las montañas hasta el mar Mediterráneo. Al atardecer, los tonos dorados del sol iluminan el paisaje, creando una escena de postal que quedará grabada en la memoria de quienes la contemplen. Es el broche perfecto para una jornada cargada de emociones y descubrimientos.
Un viaje inolvidable en camper de alquiler
Esta ruta en camper por la Sierra del Maigmó, Jijona y sus alrededores es un viaje que combina historia, naturaleza y cultura en igual medida. Cada día ofrece experiencias únicas y recuerdos imborrables, en una región que sorprende por su diversidad y belleza. Si buscas un destino que te permita desconectar mientras descubres rincones con encanto, esta ruta es una elección perfecta.
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NARCISO PARDO
CEO de Furgocasa Campervans